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- Plaga Cuarentenaria Ausente
Los huevos son colocados sobre las hojas del hospedante en ooplacas de color verde claro y recubiertas de cera.
La larva es de color verde claro, su cuerpo puede alcanzar una longitud 22 mm y posee setas largas. Su cabeza varía entre el verde claro y el marrón amarillento con marcas oscuras laterales.
El adulto es de aproximadamente 20 mm de envergadura, presenta alas de color marrón claro con dos bandas de color más oscuro.
Pandemis heparana presenta dos generaciones por año. Pasa el invierno como larva de primeros estadios, cuando empieza la brotación se sitúa cerca de las yemas de flor para alimentarse.
Completa el ciclo entre las hojas que junta mediante hilos de seda para procurarse refugio. Los primeros adultos aparecen al inicio del verano y al cabo de unos 20 días se da la emergencia de las larvas.
Estas evolucionan alimentándose de hojas y de la epidermis de los frutos apareciendo los adultos de segunda generación a finales de verano.
Las larvas nacidas en otoño evolucionan poco y entran en diapausa protegidas en las grietas de ramas y troncos para reiniciar la actividad a la siguiente brotación.
La larva suele unir las hojas con hilos de seda para conformar un capullo, el cual puede quedar adherido a los frutos también, donde se alimenta y empupa.
El estadío larval se alimenta de las hojas, de las inflorescencias y de la epidermis de los frutos, dejando lesiones sobre estos últimos similares a la de un bordado, lo que lleva a la pérdida de su calidad.
Las heridas que provoca en los frutos los devalúan por completo mientras que los daños sobre hojas no suelen tener consecuencias económicas.
Si las poblaciones son elevadas los daños en prefloración pueden ser significativos pero los peores suele producirlos la segunda generación sobre frutos en fase de maduración.
