- Tetranychidae
- Plaga Cuarentenaria Ausente
Huevos: son redondos, transparentes a amarillo claro. Pueden estar rodeados por hilos de seda en las áreas densamente pobladas.
Adultos: son muy pequeños (0,3 mm de largo) pero fácilmente visibles con una lupa de mano de 10 aumentos. Son de color amarillo pálido a verdoso; poseen 8 patas; 3 pares de manchas oscuras y cerdas largas en su superficie superior. La hembra es regordeta y de forma ovalada, mientras que el macho es más pequeño, más delgado y tiene un abdomen afilado. A diferencia de las hembras adultas, los machos no se ven abundantemente.
Ciclo de Vida:
Todo el ciclo de vida tiene lugar en la parte inferior de las hojas dl hospedante. Las hembras adultas ponen alrededor de 25 a 40 huevos durante 10 a 20 días.
Los huevos tardan entre 5 días y 3 semanas en eclosionar, dependiendo de la temperatura.
Una vez que los huevos eclosionan, los ácaros pasan por tres etapas de alimentación inmaduras antes de convertirse en adultos.
Las hembras hibernan en la hojarasca o tierra para macetas y en las grietas y áreas rugosas del tallo de la planta. La primera generación ocurre en primavera.
Las hembras emergentes trepan por el tallo, se alimentan y ponen huevos.
Bajo condiciones adecuadas, pueden incrementar de manera importante su población.
E. sexmaculatus se alimenta principalmente de la parte inferior de las hojas, concentrando su actividad junto a las nervaduras de las hojas.
Los síntomas característicos son la presencia de hojas deformadas y decoloradas, la formación de racimos de flores de forma anormal, tejido con ampollas, manchas necróticas en las hojas, caída de hojas o muerte regresiva de la punta de los brotes.
Otros síntomas que sugieren la presencia de ácaros son hojas completamente desarrolladas con una franja amarilla en la nervadura central o bronceado en la superficie superior de la hoja, membranas entre la nervadura central y la superficie superior de la hoja, o membranas entre la base del pecíolo de la hoja y el tallo de la planta.
La alimentación al inicio de la temporada se puede notar primero en la parte inferior de las hojas a lo largo de la nervadura central, en la base del pecíolo de la hoja o en la nervadura central de las hojas recién formadas.
Si estos ácaros atacan durante los primeros signos de un nuevo crecimiento, pueden causar la abscisión (separación) de las puntas de los brotes en desarrollo del resto de la planta.
Las generaciones posteriores se mueven hacia la superficie superior de las hojas expandidas, provocando una ligera formación de ampollas cerca de la nervadura central y creando redes que forman un puente entre la nervadura central y la superficie de la hoja. Inicialmente, las redes están cerca del tejido y son difíciles de observar, pero si las poblaciones son lo suficientemente altas, los ácaros tejerán redes entre el tallo y los pecíolos. Más adelante en la temporada, si las poblaciones son abundantes, los ácaros se acumularán en las puntas de las hojas y pueden encontrarse suspendidos en hilos de seda desde los bordes de las hojas superiores.
La alimentación de los ácaros evita que las glándulas del pecíolo de las hojas produzcan secreciones y los tejidos de las hojas afectadas pueden exudar látex. Si bien el ácaro prefiere el crecimiento de hojas tiernas, también atacará el tejido tierno del tallo, incluso después de que las puntas de los brotes se hayan abcisado.
En el palto, la alimentación del E. sexmaculatus aparece como una decoloración de marrón a púrpura junto a las nervaduras de las hojas.
En los cítricos, principalmente pomelos pero también naranjas, al alimentarse de los tallos de las hojas y ocasionalmente de los tallos de la fruta, la fruta se amarillea y se cae.
Los signos de alimentación de las variedades de uva blanca y roja son sombras amarillas o rojas, respectivamente, a cada lado de las nervaduras y visibles desde ambos lados de las hojas.
