Nombre vulgar
Gusano carpintero del ñire
Tipo de plaga
Insectos
Taxonomía: Insectos
  • Lepidoptera > Cossidae
Condición:
  • Presente solo en algunas áreas del país
Cultivos / Órgano afectado:
  • Nothofagus pumilio: Tronco
  • Nothofagus antarctica: Tronco
Descripción biológica

Las diferentes fases de desarrollo se distribuyen de la siguiente manera; huevo: desde mediados a fines de septiembre; larva: todo el año; pupa: en agosto y septiembre; adulto: desde la primera mitad de septiembre hasta fines de febrero, con ejemplares aislados en marzo y abril. La larva es de hábitos xilófagos, dañando principalmente el xilema y no el floema; cavan una única galería que inicialmente es en sentido transversal hasta llegar al duramen, para luego dirigirse en sentido longitudinal-ascendente. Las larvas al llegar a su último estadío tapan el agujero de emergencia y se dirigen al final de la galería, donde construyen una cámara pupal, para así pasar a la fase de pupa, la cual, cuando está próxima a eclosar, se dirige a la entrada de la galería, rompiendo el tapón y asomando parte de su cuerpo fuera del hospedero para así eclosar fuera de él. En cuanto a las larvas, éstas se alimentan de hongos que cultivan en el interior de las galerías. El adulto es de hábitos crepusculares nocturnos, en cuanto al vuelo, la dispersión, el apareamiento y la postura de los huevos, permaneciendo luego inactivos durante las horas del día. Una vez emergidos del interior de los árboles, los adultos están ya en condiciones de aparearse, y una vez ocurrido el apareamiento, inician la oviposición dentro de las 24 horas siguientes. Esta la realizan depositando los huevos en el fuste de los árboles, principalmente en los puntos de inserción de ramas y/o en grietas de la corteza, en masas o grupos de 30 a 50 unidades, hasta alcanzar un número cercano a los 200 huevos. El hecho de que las hembras sean activas voladoras y que las larvas tengan hábitos polífagos, hacen pensar que no tendrían problemas en dispersarse. Sin embargo, Ch. valdiviana muestra una clara tendencia a reinfestar los árboles ya atacados en la temporada anterior, con lo cual su capacidad de dispersión se ve atenuada, siendo ésta más bien moderada.
Morfología: Huevo:Es de forma ovalada, mide 1,4 mm de largo por 0,9 mm en su ancho máximo, esculturado con un retículo cuadriculado, de color verde blanquizco al ser recién puesto, tornándose opaco cuando está próximo a eclosar. Larva:Recién nacida mide unos 3 mm de largo por 0,6 mm de ancho máximo y pueden llegar a medir 54 mm de largo por 9 mm de ancho máximo, es de color rosado brillante, existiendo también algunas de color amarillento y blanquizco, siendo la cabeza de color castaño oscuro. El primer segmento torácico presenta una placa quitinizada de color castaño oscuro con una región central más clara. Presenta espiráculos en el primer segmento torácico y en los primeros ocho segmentos abdominales. Posee tres pares de patas torácicas y cinco pares de espuripedios ubicados en los segmentos abdominales 3, 4, 5, 6 y en el segmento anal. Pupa:Mide entre 15 a 39 mm de largo, con un ancho máximo de 9,0 mm, su color es pardo-rojizo claro, tornándose muy oscuro cuando está próxima a eclosar; llama la atención un proceso frontal negro de 0,75 mm de ancho, ubicado en la línea medio-ventral. Presenta un capullo hecho con seda y con trocitos de madera y aserrín del hospedero. Los espiráculos están presentes en los segmentos 2 al 6, todos estos segmentos además del 7° y 8°, en su lado dorsal presentan dos proyecciones de bordes crenulados y/o espinosos muy notorios. Adulto:En la hembra, la extensión alar varía de 43,4 a 62 mm y la longitud corporal de 18,2 a 25 mm. Las alas anteriores son de color gris-ceniza claro a gris-castaño, con manchas pequeñas, oscuras, la mayoría subtriangular, ordenadas en una franja paralela al borde distal y en el tercio basal del ala; el área basal, entre la franja y el cuerpo, es gris plateado; en el centro del ala (celda discal) hay una mancha cenicienta (en individuos secos) o blanca verdosa (en individuos vivos), que contrasta con el color gris-castaño del resto. Segundo par de alas castaño oscuro con dos o tres pequeñas manchas blancas bordeadas de negro ubicadas en la parte anal del borde distal. El cuerpo, grueso, cubierto de pelos gris-plateados en el noto y en la línea medio dorsal del abdomen; los costados del abdomen con pelos oscuros. En el macho, la extensión alar varía de 37 a 38,9 mm y la longitud corporal de 17,1 a 18,4 mm. Siendo los machos definitivamente más oscuros que las hembras y más pequeños; la maculación alar es similar aunque más difusa. Las antenas en ambos sexos son similares, subfiliformes en los dos tercios basales y microserradas en el tercio distal, esto último ligeramente más acentuado en los machos. Los colores de las alas y pelos del cuerpo varían en tonalidad, siendo en general más claros en individuos vivos.

Signos y síntomas / Daños

Cuando recién está comenzando a actuar el insecto se puede observar exudación de savia por los orificios de entrada de las larvas; además hay expulsión de serrín fino y en poca cantidad, el cual aparece especialmente en los nodos de separación de las ramas. Posteriormente, cuando el daño ya está avanzado hay expulsión de aserrín en forma más abundante, siendo éste más grueso y fibroso. Los orificios presentan un diámetro entre 10 a 12 mm y hay abundante cantidad de aserrín en la base de los troncos. Por otra parte, cuando las larvas ya han completado su desarrollo y están próximas a pupar, taponan el orificio de salida con un tapón globular y delgado, compuesto de aserrín fibroso y seda como material cementante, sobresaliendo éste del fuste. Luego, cuando los adultos emergen del árbol, durante la primavera y verano, dejan las exuvias pupales asomando de los orificios de salida en el árbol. Además, los árboles atacados expelen un olor vinagroso característico. El daño se presenta en árboles vivos en el interior de la madera del fuste y, a veces, en ramas gruesas. La larva es posible encontrarla a lo largo de todo el año, debido a que su ciclo vital puede extenderse a dos años. Un ataque intenso puede comprometer gran parte del xilema en la sección afectada, producto de las múltiples galerías realizadas por las larvas, lo que conlleva una disminución de la resistencia del fuste, facilitando su eventual caída por efecto del viento, lo cual trae aparejado una muerte indirecta del ejemplar. Por otra parte, el hecho de que las larvas de Ch. valdiviana mantengan sus galerías limpias o libres de aserrín, posibilita y facilita el ingreso de hongos, lo que se traduce en manchado y/o pudrición central del fuste.

Condiciones predisponentes

Ataca ejemplares debilitados; ovipone abundantemente sobre heridas de árboles abatidos.

Bibliografía que sustenta la condición fitosanitaria de la plaga
  • Dapoto, G.; Giganti, H.; Gentili, M.; Bondoni, M.; 2003. - En: Lepidópteros de los bosques nativos del Departamento Aluminé (Neuquén-Argentina). II Contribución.. - Revista Bosque. Universidad Autral de Chile. Valdivia. - ISBN/ISSN: 0304-8799
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