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- Plaga Cuarentenaria Ausente
Huevos: son planos, ovales y verde grisáceo, miden 0,7-0,9mm. Los huevos son puestos, generalmente, en la superficie de la corteza de los vegetales huéspedes en una sola capa, en una gran masa aplanada.
Larva: puede medir hasta 22 mm de longitud. La cabeza y la placa protorácica son de color marrón a negro, el abdomen es verde claro a verde oscuro en el dorso, más pálido ventralmente. La placa anal es marrón claro o verde. Las larvas se identifican principalmente por su coloración y por la posesión de los espiráculos redondos protorácicos.
Pupas: miden entre 9 y 11 mm de longitud, son color marrón oscuro, con alas y abdomen pálidos lateralmente.
Adultos: Las alas anteriores son de 15-18 mm de largo, el color de las alas anteriores masculinas varían de marrón claro a marrón púrpura. Las marcas son a menudo rojizas. Las alas posteriores son de color gris. La hembra tiene en las alas anteriores marcas más débiles, son grises con una zona apical de color amarillo anaranjado.
Esta plaga enrolla hojas creando un refugio dentro del cual empupa el ultimo estadio larval. Puede atacar a las inflorescencias, a las hojas jóvenes y también a los frutos recién cuajados, que continúan creciendo, pero se deforman intensamente y presentan lesiones en la piel. Los mayores daños se producen al principio de la brotación y floración de los frutales.
Los ataques a las flores y frutos pequeños pueden ser graves, provocando pérdidas de cosecha directa o, como en la manzana, la formación de frutos con aspecto bronceado, deformes y no comercializables.
