Alternaria alternata

Los síntomas comienzan con la aparición de unas pequeñas puntaciones castañas rodeadas de un halo clorótico en las hojas basales, que avanzan paulatinamente hacia el estrato superior.
En los frutos inicialmente las lesiones son redondeadas, ligeramente deprimidas, pardo negruzcas con contornos bien definidos, duras y secas, sobre lesiones preexistentes o localizadas en la zona calicinal o peduncular. En ambientes cálidos y húmedos rápidamente aumenta el tejido enfermo y se recubre por un moho gris-negruzco constituido por las fructificaciones del patógeno. En el interior de los frutos se desarrolla una podredumbre firme y esponjosa de color oscuro que avanza en forma de cuña y puede alcanzar hasta la zona seminal. Es posible observar en frutos externamente sanos, una podredumbre de color gris oscuro en la zona interna.

En el cultivo de Soja, su aparición se relaciona siempre a la etapa final del cultivo y con condiciones de elevada humedad, se manifiesta como un micelio gris oscuro sobre las semillas. Los conidios típicos son oblongos, coloreados, con tabiques transversales y longitudinales que permiten un fácil diagnóstico y se disponen frecuentemente en cadenas largas. Si bien pueden encontrarse muy elevados porcentajes de infección, a menudo no se relaciona su presencia con una disminución en la germinación. El patógeno se aloja externamente en el tegumento y es favorecido por la presencia de heridas.

En Nicotiana tabacum las lesiones necróticas se localizan inicialmente en las hojas inferiores, luego ascienden. Las lesiones primero son húmedas, redondeadas, pequeñas, que aumentan de tamaño, en una semana pueden alcanzar un centímetro. Las manchas de color marrón pueden estar rodeadas por un halo amarillo, las manchas se presentan concéntricas, por el crecimiento del hongo desde el centro, las lesiones pueden alcanzar hasta 3 cm de diámetro. El daño principal es que se anticipa el secado de hoja por muerte de las áreas afectadas, las hojas pueden desprenderse, las manchas concéntricas se pueden observar en hojas, tallos, pecíolos y cápsulas. Esta enfermedad también puede presentarse en almácigos de tabaco.

Sobre Origanum vulgare se produce tizón foliar, que reviste importancia porque progresa rápidamente, produciendo el deterioro del producto; los síntomas se manifiestan desde el ápice hacia la base de la planta en forma de manchas foliares; las lesiones comienzan en el extremo de las hojas superiores, luego oscurecen toda la lámina y el pecíolo. Generalmente se produce necrosis, las hojas quedan secas y adheridas al tallo.

En trigo causa manchado y puntuaciones negras en el grano. En las hojas puede ocasionar pequeñas manchas necróticas rodeadas de un halo clorótico.